06:00 | Yamagata, abril. 29
Por Sofía Pichihua
El estudio de la naturaleza se convirtió en su verdadero sueño y es su día a día contribuir desde la ciencia a su protección. dr. Larry López Cáceres, junto a un equipo multidisciplinar de investigadores internacionales de la Universidad de Yamagata (Japón), desarrollará un sistema de inteligencia artificial que permitirá clasificar los daños que provoca el insecto conocido como descortezador en los bosques japoneses.
Ese maria tanne (Abies mariesii) es una especie de árbol distribuida desde la prefectura de Gifu hasta la prefectura de Aomori en Japón (desde el centro hasta el norte de la isla de Honshu), cubriendo un área de unos 700 km en la isla. En la prefectura de Yamagata, rodeada de montañas, Estos árboles no solo tienen un valor ecológico y ayudan a reducir el riesgo de deslizamientos provocados por las continuas lluvias, pero también forman parte de las “terapias de bosque” de los vecinos a los que les gusta observar los cambios fenológicos de la vegetación en primavera y verano y en especial el cambio de color de las hojas en otoño que los bosques transformaron en un colorido arcoíris.
pero luego viene Invierno que amplía su atractivo turístico. Debido al viento, las fuertes nevadas y la particular arquitectura de los abetos en estas zonas montañosas, estos árboles quedan completamente cubiertos de nieve, formando los “Jujyo” como se les llama en japonés o “monstruo de nieve“. Sus formas espectaculares los convierten en una visita obligada para los visitantes de la estación de esquí de Zao Onsen y para muchos visitantes nacionales e internacionales que usan el teleférico para verlos.
Sin embargo, este Los espectáculos naturales están en peligro debido al ataque escarabajo de corteza infestando estos árboles hasta que terminan su ciclo de vida en unos pocos años.
Desde 2019, el equipo de investigación dirigido por el Doctor en Ciencias Ambientales Larry López, profesor de la Universidad de Yamagata, ha estado investigando la Efectos que han producido estos insectos y contribuye a la protección del bosque proporcionando información valiosa a las autoridades de la prefectura.
De esta forma, las autoridades locales pueden retirar el árbol muerto y así reducir la propagación de la corteza en este bosque y evaluar nuevas estrategias para reforestar la zona.
“Son procesos naturales, nadie los puede culpar, porque estos ataques de insectos se observan en todas partes del mundo, no solo en Japón. Es un mecanismo que usan los bosques para regenerarse”, explica el investigador peruano Larry López agencia andina. La valiosa investigación tiene como objetivo analizar este proceso natural que impulsa la regeneración forestal, que originalmente se pensó que se debía al cambio climático. Además, con la extensa recopilación de datos recopilada durante casi cuatro años de trabajo, se espera que proporcione información para acelerar la recuperación de estas especies en el país asiático.
Uso de la inteligencia artificial
El desarrollo de sensores remotos, principalmente drones, y un modelo de inteligencia artificial Permitirá la identificación rápida y automática de especies dañadas por escolitina en cualquier zona de Japón, y se espera que este modelo se utilice en Eurasia y Europa en un futuro próximo.
según el dr. López, las imágenes del dron -previamente procesadas en software especializado e incluso con la ayuda de supercomputadoras para su análisis- nos permiten observar con gran detalle cómo se propaga el insecto, qué tan rápido se descompone el árbol, qué zonas son las más afectadas, alrededor, entre otros por ejemplo, reconocer si hay árboles que son más resistentes que otros y poder hacerlo en el futuro estudios genéticos para una mejor selección de árboles para la regeneración.
“Es imposible caminar en el bosque. (Con imágenes de drone) podemos ver mil, dos mil o tres mil árboles desde nuestro escritorio sin necesidad de estar en el bosque. Estas imágenes nos dan una muy buena idea del porcentaje de defoliación (hojas caídas) debido al daño causado por la infestación del pinzón de roca. Nos permite ver qué árboles están sanos o no han sufrido ningún daño y cuáles han comenzado a deteriorarse”, dice el científico peruano.
“Usando drones, podemos rastrear el nivel de descomposición de cada árbol y saber cuánto tiempo tardará en morir. No todos mueren al mismo tiempo. Estos son datos muy valiosos que no estaban disponibles en los estudios de ciencias forestales hace unos años”, confirma el Dr. López.
Así, el modelo de inteligencia artificial para bosques permitirá aplicar este sistema en otros ámbitos Identificar árboles infestados o sanos.
“Si vamos a un área como la prefectura de Nagano, donde hay una concentración muy grande de abetos, no necesitamos recopilar datos desde el principio, pero el modelo nos dice si hay árboles infestados o si todo el bosque está saludable Y podemos repetirlo en cualquier lugar y evaluarlo de inmediato”, estima el investigador.
Por otro lado, la Dra. López que los resultados de sus estudios están avalados por su equipo de investigación, caracterizado por la multidisciplinariedad y la internacionalidad. El grupo de investigación está formado por tres estudiantes de doctorado, ocho estudiantes de maestría y tres estudiantes de pregrado, entre otros, de Japón, Alemania, China, España, Rusia, Vietnam y Perú.
Análisis de biomasa arbórea
A partir de junio del próximo año, la inteligencia artificial también se utilizará en otro proyecto estimar automáticamente la biomasa de cada árbol de los miles en propiedad privada establecidos para instalar una planta de energía de biomasa.
Hasta la fecha, según el investigador peruano, ha estudiado decenas o incluso 100 hectáreas de bosque, pero este ambicioso proyecto pretende que el dron pueda recoger información de 100 o 200 hectáreas por día para cubrir 1.000 hectáreas de terreno.
Para analizar esta gran cantidad de información, la Universidad de Yamagata cuenta con una supercomputadora que procesará rápidamente estos datos y proporcionará los primeros resultados del modelo, que se pueden presentar en enero de 2023.
Así, con el modelo de inteligencia artificial entrenado, será posible conocer las características del árbol: estimado a partir de su peso, su tamaño, así como la calidad y cantidad de madera que ofrece, es decir, la electricidad que se podría generar con este voluntad de recursos.
Publicado: 29/04/2022